Gracias, es la palabra universal de gratitud. Se me concede una singular deferencia para convivir en la reunión de la mesa redonda Panamericana de Managua. Os saludo en lo personal y a nombre del Movimiento Mundial Dariano, con sede en la Ciudad de Miami, Florida USA. A la Directora Sandra Valle, de la Mesa Redonda Panamericana de Managua y socias de la directiva, a la anfitriona de esta memorable sesión Sra. Luis Emilia Amador, a la Lic. Rosa Nini Borgen, secretaria nacional de las mesas redondas Panamericanas de Nicaragua y al vínculo de mi presencia Lic. Maria Elena Arana. “Una Para todos y todas para Una, es el grito de Unidad y júbilo. Entiendo que ese original lema de solidaridad, tiene su origen en la célebre novela de los tres mosqueteros de Alejando Dumas, y lo de la mesa redonda, por los relatos del Rey Arturo, así nos ilustra su fundadora Sra. Florence Terry, de San Antonio Texas USA e inspirada en el ideario de Libertados Simón Bolivar, de una América únida en un solo corazón fundó la mesa redonda Panamericana el 16 de Octubre de 1916, se cerca su centenario. Esta fecha del 29 de Agosto, es cierta forma es conmemorativa al espíritu y legado panamericanista de Rubén Darío, es su encuentro con España en 1892, en su carácter de secretario de la delegación de Nicaragua en Madrid. La mejor referencia es su poema a Colon, escrito en esa ocasión y publicado en su libro El Canto Errante, ¡ desgraciado admirante, tu pobre América/ tu india virgen y hermosa de sangre cálida/ la perla de tu sueños, es una histérica. de convulsivos nervios y frente palida. Cristo va por las calles flaco y enclenque./Barrabas tiene esclavos y Charreteras? Y culmina: Cristoforo Colombo, pobre Almirante,/ ruega a Dios por el mundo que descubriste! Se me ocurren algunos asteristicos del Panamericanismo en la vida y obra de Ruben Dario, como nexo e identidad espiritual. En su poema Tutecotzimi, “Mi piqueta trabaja en el terreno de la America ignota/Suena armoniosa mi piqueta de poeta/ y descubre oro y opalos y rica piedra fina, templo o estatua rota ¡. Ya el Poeta consagrado en Azul, Prosa Profanas y Cantos de Vida y Esperanza, en su memorable discurso del 22 de Diciembre de 1907, en el Palacio Municipal de Leon, proclama su ser meseanico en America, “ Yo vine en un momento en que era precisa mi intervención en el porvenir del pensamiento español. Yo soy soy un instrumento del supremo destino. Y en otro de sus periodos, su escribe “La misión del Poeta es cultivar la esperanza, ascender a la verdad por el ensueño y defender la nobleza y frecura de la pasajera existencia terrenal” Con estos pensamientos darianizantes, que escribió en su obra “España Comtemporánea”, me propongo, emprender mi tema panamericanista. El poema “El Porvenir” de epístolas y poemas (1885) su primer poesía de inspiración panamericanista, en ella encontramos estrofas como esta: Salve, America hermosa. El sol te besa/ del arte la potencia te sublima/ el porvenir te cumple su promesa./ te circunda la luz y Dios te mima./ Dos años antes en 1883, en la republica de El Salvador escribe “Al Libertador Bolivar” el 24 de Julio, en ocasión del primer centenario de su nacimieto, es un poema de aliento continental, pero el Dariologo Ing. Ernesto Gutierrez estima que El Porvenir es el primer poema de inspiración panamericanista de Dario. En estos asteriscos, doy un salto de calendario, nos trasladamos al año de 1906, año fecundo para el Panida en el tema panamericano, era el Cónsul de Nicaragua en Paris a partir de 1903, recibe el nombramiento de secretario de la delegación de su patria para asistir a la III conferencia Panamericana de Rio de Janeiro, Brasil, en Julio de 1906. En Nueva York se junta con el secretaria de Estado de Estados Unidos, Dr. Elihu Root, premio nobel de la paz 1912, hacen amistad en la travesía hasta llegar a Rio de Janeiro. Dario es el Padre del Modernismo Literario Hispanoamericano, El Presidene de esa misión es el Dr Luis Felipe Corea, que envídia las bienvenida que dan al Poeta, son las envidias subterráneas de que halabla el poeta y que salen a flote. En Rio de Janeiro Dario comparte la reunión panamericansita los vates Ramon Mayorga Rivas de El Salvador, Juan Ramón Molina de Honduras y el Poeta Guillermo Valencia por Colombia. Hay una anécdota en una de una de las recepciones, Estos poetas compañeros de Darío, al vivir las marginaciones que Corea hacia a Dario, animaron al poeta al calor de los brindis hablar y dijo: “ Donde los secretarios eramos los gigantes y los presidentes los pigmeos. En rio Jainero Darío panamericaniza, escribiendo el poema Salutacion al Aguila, un canto que une a la Amrica del norte con la América latina. No es el poema claudicante ante su oda a Roosevelt, escrito en malaga, España en 1904. En Salutacion al Aguila mantiene la dignidad de la raza latina. Aguila existe el Condor/ es tu hermano en las alturas.’/ Escribe la Oda a Mitre, al fundador del periódico La Nacion y Ex presidente de Argentina Escribe el prologo de Alma América de José Santos Chocano. Y entre estos asteriscos el monumental Canto a la Argentina, escrito en 1910 por encargo de la Nacion de Buenos Aires, considerado otro de los poemas antológicos, con aliento continental, publicado en un libro con el titulo del poema en 1914, que este año cumple su primer centenario.Y ya para concluir con la mención de algunos poemas panamericanos, ubiquemos en Nueva York con sus poemas la gran cosmopolis y en especial su poema Pax, leído en la universidad de Columbia el 4 de Febrero de 1915, entre los asistencia estuvo el Poeta Salomon de la Selva, quien escribió la crónica de su presentación. El Poeta tenía entonces 48 años y está a pocos meses de su tránsito a la inmortalidad, el que conmemoraremos entre pocos meses en Febrero de 2016, sin duda las mesas redondas Panamericanas de Nicaragua y América, preparan actos para tan apoteósica efeméride panamericana. Oid los versos finales del poema pax, conemorativo a la primera guerra mundial de 1914, hace semanas se conmemoró en Paris,su centenario.
Oh pueblos nuestros, Oh pueblos nuestros, Juntaos
En la esperanza y en el trabajo y en la paz.
No busquéis las tinieblas, no persigáis el caos,
Y no requeis con sangre nuestra tierra feraz,
Ya lucharon bastante, los antiguos abuelos
Por Patria y Libertad, y un glorioso clarín
Clama a través del tiempo, debajo de los cielos,
Washington y Bolivar, Hidalgo y San Martin.
No, no dejéis al odio que dispare la flecha,
Llevad a los altares de la paz miel y rosas.
Paz a la inmensa América, Paz en nombre de Dios.
Gracias- 29 de Agosto de 2014.
En el fecundo, glorioso y errante itinerario de la vida y obra del genio del Poeta Universal Rubén Darío, ocupa un capitulo destacado su relación y amistad con distinguidos y eminentes profesionales de la medicina, vinculados a su mundo social, cívico, literario, diplomático político y cotidiano.
Entre mis apuntes inéditos esta este tema que considero de extraordinario interés para conocer aspectos personales, que pertenecen a la vida y vivencias de un Genio, que además de su deslumbrante vida poética, fue poseedor de una patología, que tiene como alfa y omega, su controversial desarrollo psicosocial en sus 49 años y 20 días de existencia, debido a esa terrible enfermedad de la dipsomanía que el lucho por dominar. (la inquirida bohemia) . Sobre este tema se han tejido innumerables anécdotas, mas predomina la lucidez y posesión de sus facultades mentales en su creación literaria y sus prudentes retiros en sus recaídas, ora en sus habitaciones, donde tenía acceso sus familiares, amigos de circunstancias y especialmente médicos fraternales, que le ayudaron y asistieron en sus depresiones y nostalgias. El egregio escritor colombiano, José María Vargas Vila. “el amable enemigo” del Panida, recrea este tópico con la dignidad, la pasión y decoro que amerita la vida y obra del Genio de Darío. “Darío no fue nunca..el bohemio profesional que muchos se gozan en pintar. Darío amaba el lujo, el confort, todas las formas de la exquisita distinción. En su característica lacónidad, solía estimular a sus amigos con la palabra admirable, sin faltar en el ágape cordial la de “tengo sed”, una de sus palabras sacramentales.
El nacimiento del Poeta en Metapa, no es solo novelesco, por su viaje en carreta de León a Metapa, hoy Ciudad Darío, donde naciera un 18 de Enero de 1867, sino que las dolorosas connotaciones de esa peregrinación mesiánica, tiene como génesis a una madre mártir, Doña Rosa Sarmiento a un indiferente progenitor, Don Manuel García, comerciante y pariente de ella, con un historial clínico de alcoholismo incontrolable y amante del harem. El Poeta casi no lo conoció y las pocas veces que lo menciono fue como tío o Don Manuel, era comerciante iletrado. El matrimonio de Rosa Sarmiento y Manuel García fue de conveniencia. Se le atribuye la paternidad del Poeta al sacerdote Felipe Gurdián Pastora , educado en el Pio Latino de Roma Dr. en filosofía y además medico, ejerció su ministerio en León, su afición a las damas y al mundo profano, fueron motivo de severos castigos canónigos. La hipótesis de la paternidad del Poeta ha sido comentada por el Prof. Carlos A. Bravo, literato granadino, El Dr. Alejandro Bolaños Geyer, Mons. Padre Federico Arguello, Don Adolfo Calero Orozco, José Floripe en Estelí, y en esta época contemporánea por el Dariologo Lic. Gustavo A. Montalván y comentada por el Periodista y escritor Joaquín A. Pastora en su reciente libro Por “Dos Caminos” entre otros. Es el primer medico que aparece en la vida de Darío, ya que era confesor de Doña Rita Darío, hermana de Don Manuel y consejero espiritual de las hijas de María a la que pertenecía la joven Rosa Sarmiento. En el momento del nacimiento del Panida, el cura se encontraba castigado en el norte del País, se le ubica en La Trinidad y aparece en los libros de registros parroquiales de Matagalpa. El niño de Metapa fue bautizado el 3 de Marzo de 1967, en la Catedral de León con el nombre de Félix Rubén García Sarmiento, conocido universalmente como Rubén Darío. Sean estas sensibles disgregaciones, las que tienen que ver con el tema que me aventuro desarrollar.
Darío fue hijo adoptivo del Coronel Félix Ramírez Madregil y de Doña Bernarda Sarmiento, su tía abuela, El Poeta creció solitario y fue actor y paradigma de su vida cotidiana y cosmopolita. Darío en sus etapas cronológicas de vida y especial en la vitalidad de su vida en América y Europa aprecio y valoro sus amistades medicas, no solo para sus vínculos literarios, diplomáticos y sociales, sino que dieron asistencia y soluciones a sus crisis de salud, que como todos sabemos fueron producto de la “inquirida bohemia”. Permítanme enumerare sus amistades medicas y las circunstancias de sus encuentros y desde luego no me será posible referirne a su creación poética, al modernismo literario hispanoamericano, ora en Azul, su obra primigenia, publicada en Chile, ( 1888) a Prosas Profanas, libro señero del modernismo, publicado en Buenos Aires Argentina (1896) a su Canto de Vida Esperanza, el libro cimero de su revolución literaria, publicada en Madrid, España en 1905, o de sus decenas de publicaciones en prosas, como España Contemporánea, Letras, Los Raros, La Caravana Pasa, Opiniones, o de sus innumerables artículos de prensa, que lo consagran como un clásico de la literatura universal. Su fecunda obra literaria en América y Europa era desde luego la credencial y la razón admirativa de su conspicuo entorno y de sus amigos médicos científicos y liricos fundamentales para la asistencia y alivio de su salud.
Ahora me propongo destacar, algunos nombres y circunstancias de amigos médicos que tuvieron el privilegio de formar parte de la vida y obra de Darío, ya como preceptores de su infancia, como es el caso del Dr. Jerónimo Ramírez, su profesor de primaria en ( León, 1873-1876). A quien le dedicara el poema “Ali” Y por esa época de la infancia de Darío, tuvo como compañero de estudios en el colegio de los Jesuitas, en la Iglesia de la Recolección de León al que mas tarde seria su mejor amigo fraternal, mecenas y medico, Luis H..Debayle, que junto con el Dr. Escolástico Lara, también medico del Poeta, son considerados como los abanderados del movimiento científico en Nicaragua en el siglo 19 y principios del 20. Toco al Dr. Debayle, y al Dr. Escolástico Lara, el embalsamiento del cadáver asistido por los practicantes Luis E. Hurtado y Serbulo González. Toco también al Dr. Luis H. Debayle la extracción del cerebro del Bardo y entre los asistentes el entonces estudiante de medicina Salvador Pérez Grijalva.
En la gravedad del Poeta intervinieron médicos como Dr. Juan Bautista Sacasa y posteriormente con el estudio del cerebro del Poeta, el Dr. Juan José Martínez, en la Ciudad de Granada. La partida de defunción No,76 del registro civil de la Ciudad de León, del año 1916, folio 116, dice: Que a las diez y dieciocho minutos de la noche del día seis del corriente, falleció en esta Ciudad, a consecuencia de cirrosis atrófica del hígado, el Rey de la literatura Hispanoamericana, raro y eximio poeta Rubén Darío, de cuarenta y nueve años y veinte días. Respecto al cerebro de Darío, después de las muertes del Dr. Luis H. Debayle el 24 de Marzo de 1938 y del Dr. Escolástico Lara el 16 de Agosto de 1939, termino el misterio del paradero del cerebro del Poeta, con la sorprendentes revelaciones del Dr. Salvador Pérez Grijalva en su publicación de los cuadernos universitarios, No 21, del 21 de Septiembre de 1962.“El cerebro autentico del inmortal Panida, nadie lo tiene, esta, donde debe estar, en la tumba bajo las arcadas de la gran Basílica de la Muy Noble y Leal Ciudad de Santiago de los Caballeros” enfatiza en su obra EL CEREBRO DE RUBEN DARIO ESTA EN…..Como es del conocimiento el cerebro recién salido de la caja craneana, fue arrebatado por Andrés Murillo, hermano de Rosario Murillo, ( la esposa forzada de Darío, su garza morena, pues sus verdaderos amores fueron su primera esposa, Rafaelita Contreras, con quien el Poeta procreo un hijo, Rubén Darío Contreras, nacido en Costa Rica y que su tío político, Don Ricardo Trigueros, lo mando a estudiar medicina a Berlín, Alemania, completo sus estudios de medicina en Buenos Aires Argentina, es decir el primogénito de Darío era medico y un virtuoso pianista, murió en Argentina, en 1968; yo tuve la oportunidad de conocer al Dr. Rubén Darío Contreras lo visite en el antiguo Hotel Lido Palace en ocasión del primer centenario del nacimiento de Darío de 1967, quien vino desde Argentina, fue uno de los invitados de Honor por el Gobierno de Nicaragua. El otro amor y quizás el de mayor dimensión espiritual para el Panida, fue el de la española, Francisca Sánchez del Pozo, con quien tuvo un hijo en Paris, Rubén Darío Sánchez, heredero universal de los bienes y de los derechos de autor, este hijo murió de tuberculosis en Mexico en 1948, dejando su esposa en León la Prof. Cecilia Salgado con quien procreo tres hijos, le sobreviven Salvador y el abogado Rubén Darío Salgado, Argentina la mayor murió recientemente, Salvador vive en Ciudad Jardín, con su sobrino Ildo Sol, ( bachiller de mi Instituto San Francisco de Asis, 1961-1980) esta es la rama genealógica de Paca Sánchez, la campesina española de Navalsauz, a quien Darío dio su lugar de Dama tanto en la Embajada de Madrid (1908) como en el Consulado de Paris, (1903-1907) fue su esposa frustrada. En verdad este gran amor lleno el vacio insondable de una madre y de una esposa. Francisca Sánchez refresco la hoja de laurel del Poeta de 1898 a 1914. Para conocer la profundidad de este amor, hay que leer el poema A Francisca: Seguramente Dios te ha conducido/ para regar el árbol de mi fe/ hacia la fuente de noche y de olvido/ Francisca Sánchez acompáñame. He querido dedicar este paréntesis a Francisca Sánchez, la mujer que supo tolerar 14 años a Darío, la llamaba su conejito y su medicina espiritual. Aquí evoco el pensamiento de Miguel de Unamuno, “amigo” intelectual del Panida: “ Todo amor de mujer es en si verdadero y entrañable, amor de madre. La mujer prohíja a quien ama”. Gracias a esta admirable mujer campesina, que era analfabeta cuando la conoció Darío, existe el Archivo Rubén Darío en la Universidad Complutense de Madrid (1956), fuente inagotable para conocer las múltiples facetas literarias del Vate, incluyendo el tema que nos ocupa.
He iniciado la mención de sus amigos médicos que fueron fundamentales a la hora de su tránsito a la inmortalidad, para recrear el drama de su salud y su circunstancias finales. Permitidme ahora sin entrar a mayores comentarios, nombrar otras personalidades médicas, pero con connotaciones especiales, ya que se trata de dos Presidentes de Nicaragua, cuya amistad y admiración para Darío fueron fundamentales: El Dr. Adán Cárdenas, Presidente de la Republica de 1883-1887, medico graduado en la Universidad de Piza, Italia, quien distinguió al joven Rubén Darío incluyéndolo como parte del sequito presidencial , cuando el mandatario va entrevisto con el Presidente Rafael Zaldívar de El Salvador , mecenas de Darío y quien le encomendó en el Salvador la oda a Bolívar el 24 de Julio de 1883, en ocasión del Primer Centenario del Nacimiento de Simón Bolívar, ( ese original es el que Daniel Ortega regalo a Hugo Chávez, muerto Chávez donde esta ese patrimonio nacional ¿ ). En 1886, el Presidente Cárdenas, lo incorporo a la secretaria de la presidencia y ayudo económicamente a Darío en su viaje a Chile.. En la época en que Darío ejerció el periodismo en Managua (1884-1886), tuvo como medico al Dr. Luis Cruz, ciudadano guatemalteco, admirador del Poeta. Y respecto al viaje a Chile, este se concreto el 5 de Junio de 1886, llegando al puerto de Valparaíso el 24 de Junio.de 1886. (entonces el Poeta de 19 años).
En su estadía en Chile. La cuna de Azul, libro primigenio del modernismo, tuvo como medico al Dr. Galleguillos Lorca, un galeno raro, líder socialista de Valparaíso, Chile. Era medico homeópata, que Darío menciona con cariño en su autobiografía, dictada en Buenos Aires, Argentina en 1912. Otro Presidente medico, fue el Dr. Roberto Sacasa Sarria, 1889-1893- egresado de la Universidad de Medicina en Paris, ultimo gobernante conservador del periodo de los treinta años; nombro a Rubén Darío secretario de la delegación de Nicaragua de las fiestas del IV centenario del Descubrimiento de América, (1892), viaje de gran trascendencia literaria para Rubén Darío, ocasión en que hace amistad con los cenáculos de la intelectualidad española. A su regreso el Presidente Sacasa lo nombra Cónsul General en Argentina, cargo que no ejerció, simultáneamente el Presidente de Colombia Doctor Rafael Núñez, lo nombro Cónsul General de Colombia en Argentina con fecha 17 de Abril de 1993, del que tomo posesión en Agosto, después de sus estadías en Nueva York, donde se entrevisto con José Martí y su sonado viaje a Paris, Francia, donde conoció al Poeta Paul Verlaine. Darío en su estadía en Argentina, (1893-1998), destaca un especial agradecimiento a tres ilustres médicos, lo que dejo patentizado en su autobiografía en el capitulo XLIV. “Tres ilustres médicos tuve que fueron alterativamente los salvadores de mi salud. El doctor Francisco Sicardi, novelista y poeta originalísimo. El otro medico era Martin Reibel, el fraternal e incomparable Hipócrates de los poetas. El otro era Prudencio Plaza, con quien fui a pasar una temporada a la Isla Martin García ( mayo de 1895), cuando el era medico de aquel lazareto.”
EL Dr. Prudencia Plaza, además de asistir la salud del Poeta, ayudo sus necesidades económicas A raíz de la noticia de la muerte de su madre Doña Rosa Sarmiento, el 3 de Mayo de 1895, lo llevo al Sanatorio de la isla Martin
•García, donde escribe tres cartas medicas, publicada en el Diario a Nación bajo el seudónimo de Levy Itaspes, en ese lugar escribe en una madrugada en uno de sus
•episodios de recuperación y sobriedad, “La Marcha Triunfal”, con motivos de las fiestas cívicas de Argentina. Otros médicos en Argentina que conoció en el Lazareto
•de la isla Martin García fueron, Cornelio Moya Gacitúa, Presidente del Ateneo de Buenos Aires, Dr. Octavio William, Luis Agote y al Dr. José Verdes Montenegro.
En el mobramiento de Darío como embajador de Nicaragua en España por el Presidente Zelaya el 22 de Diciembre de 1908, se destaca la intervención de dos de sus amigo es médicos Dr. Manuel Maldonado y Luis H. Debayle, cuyas recomendación fueron vitales al convencer a Zelaya que Darío sabia controlar con dignidad su “inquirida bohemia”.
En Paris como Cónsul de Nicaragua (1903-1907) tiene como médicos a dos amigos fraternales y entrañables, especialmente al Dr. Nazario Soriano, a quien conoció en León, en su época de estudiante de secundaria, quien además de atenderlo en Paris le presto asistencia medica en Madrid y Palma de Mallorca. El Dr. Soriano fue distinguido en Francia como jefe de misiones científicas al Africa ecuatorial Francesa y en 1919, fue candidato a la Presidencia de Honduras. El otro medico en Paris lo fue el Dr. Diego Carbonel, ilustre venezolano a quien Darío menciona en su autobiografía con gratitud y afecto.. Otro médico lo fue el Dr. Rodolfo Espinoza Ramírez, filántropo, uno de los Ministros de Relaciones Exteriores del Presidente Zelaya y Ministro en Washington. Vice Presidente de la Republica en el periodo inconcluso del Dr.. Juan Bautisa Sacasa ( 1933-1936) , quien como hemos comentado fue medico de Rubén Darío, en la gravedad de su muerte. En Nueva York Noviembre 1914- a abril de 1915, estadía del Poeta, en su gira de paz a raíz de la primera guerra mundial, donde escribió su famoso poema Pax, el 4 de Febrero de 1915, en la Universidad de Columbia, tuvo como medico al Dr. Anibal Zelaya,sobrino del Presidente José Santos Zelaya, galeno que le asistió en el Hospital Francés, donde estuvo gravemente enfermo de neumonía y permaneció casi un mes. El Dr. León Icaza, mi amigo que (q.d.e.p.) me comento que estuvo de residente medico en la década del 70 ,en ese vetusto centro de salud .” Los médicos..? yo no creo en los médicos. han dicho tantas cosas desde Nueva York, en donde recibí el golpe mortal. El hachazo digamos” Ante la gravedad del Poeta, se le traslada a Guatemala gracias a la ayuda del Presidente Manuel Estrada Cabrera, donde lo asiste su amigo el Dr. Hildelbrando Castellón, medico y cirujano, graduado en Paris. Rubén Darío sufre una recaída a su llegada a Guatemala y se le asigna como medico a su amigo el Dr Castellón, cuya amistad se consolido en 1907, en ocasión del apoteósico retorno del Poeta a su tierra natal. El Dr. Castellón lo atiende y entre sus recomendaciones fue no mas wisky, además era orden del Presidente de la Republica, Manuel Estrada Cabrera, ante esa prohibición , Darío contesta, “yo no necesito veterinarios”.
Ante la actitud y gravedad del Poeta, el Dr. Castellón autoriza se le sirva una copa, y Darío le dice:” eres un talento ,siempre he creído en ti.” Darío es trasladado de Guatemala a Nicaragua el 25 de Noviembre de 1915, viene en compañía de su esposa Rosario Murillo, retorna con el diagnostico del Dr. Castellón, tuberculosis, descartado posteriormente por cirrosis. Es el Presidente de Nicaragua, Don Adolfo Díaz, a quien Darío le cobra la deuda de sueldos no pagados en su vida diplomática, los que ascienden a 50.000.00 pesetas, apenas le reconocieron 200 dólares. La deuda aun está pendiente.
En ocasión de la llegada de Darío en estado grave a Managua se forma la primera Junta médica, los doctores Emilio y Enrique Pallais y el Dr. Jerónimo Ramírez, maestro de primaria y amigo del Poeta. Ante la gravedad del Poeta se dispone el traslado a León, bajo la asistencia del Dr. Luis H. Debayle y el Dr. Escolástico Lara, esto sucede el 7 de Enero de 1916. (6)- Ya nos hemos ocupado de los médicos que asistieron al Poeta en su gravedad , agonía y muerte y del cerebro del Poeta, quien en sus angustias, en sus tratamientos médicos, dijo “He visto que descuartizaban mi cuerpo y disputaban mis vísceras. Si, si, así como oyen, disputaban mis vísceras.” Y esto es lo que sucedió con el cerebro del Poeta, sepultado secretamente en su tumba después de sus funerales el 13 de Febrero de 1916 por el Sr. Jorge Navas, por ordenes del Dr. Luis M. Debayle y Mons. Simeón Pereira y Castellón, debido al mal estado en que se encontraba. Para despistar a los interesados en tener el cerebro se extrajeron otros cerebros y uno de ellos permaneció mucho tiempo en poder del Dr. Enrique Debayle y fue el que presento en algunas veladas darianas Doña Emelina Tercero de Debayle, Presidenta de la Guardia de Honor Rubén Darío. El verdadero cerebro fue remitido a Granada al consultorio del Dr.. Juan José Martínez, quien hizo un exhaustivo estudio . Lo del verdadero cerebro y los falsos cerebros, es ampliamente explicado por el Dr. Salvador Pérez Grijalva en su obra EL CEREBRO DE RUBEN DARIO ESTA….. Otros médicos que escribieron sobre el cerebro del Panida, fueron los Dres. Darío Zúñiga Pallais y el Dr. León Lara M. – Todo lo acontecido fue para que no se profanara la sagrada víscera, para conservarla integra como reliquia en la centenaria universidad de León. Otro médico Servulo González , conocía el destino del verdadero cerebro.
Darío disfruto de la amistad, de la ayuda y del respeto de sus amigos médicos, los considero sinceros, digno de admiración y gratitud y si en las crónicas de sus ultimo días aparecen episodios desagradable, fueron producto de su dolor y enfermedad, “Yo no quiero que ustedes me asesinen, les dijo al Dr. Luis H. Debayle al Dr,. Escolástico Lara y llamo la mediocridad sonriente al Dr. Juan Bautisa Sacasa, quien llego hacer Presidente de Nicaragua 1933-1936, por el partido liberal, medico graduado en Harvard, hijo del Presidente Roberto Sacasa,ultimo Presidente conservador de los treinta años. El tema es extenso y he tratado de hacer una semblanza cronológica de los médicos de mayor afecto del Poeta, casi todos con vínculos intelectuales y de admiración a la portentosa creación poética del excelso Aeda, los que hicieron honor a su conciencia hipocrática, atendiendo las crisis del Panida con excepcionales atenciones.
En la vasta bibliografía de Darío, hay un libro digno de ser conocido por los médicos, el estudio científico del Dr. Danilo Guido, titulado Rubén Darío “ Soy un enfermo” publicada por Hispamer en el año 2005 e impreso en Bogota Colombia. Esta obra nos permitirá conocer y comprender mejor la personalidad del nicaragüense cosmopolita en función de genio y de hombre, cuya causa de defunción fue “ cirrosis atrófica del hígado” Darío paradigma de la literatura universal, prolongo su prematura existencia gracias a sus amigos médicos, que consideraban un privilegio la amistad con el genio, que trajo a la poesía mas luz, mas música, mas color, mas alegría al idioma castellano y cuyo luminoso espíritu pertenece a la mansión de los inmortales. Y son precisamente sus amigos médicos los que se destacan no solo en la preparación de los restos mortales del Panida, su embalsamiento, autopsia y en la extracción de su cerebro, en la casa mortuoria cuya descripción seria lamentable, casa particular hoy dia sin la dignidad histórica que merece. Y como comentamos anteriormente fueron los doctores Luis H. Debayle, Escolástico Lara y los practicantes Luis E. Hurtado y Serbulo González, los que alumbrados con tres lámparas de gasolina, prepararon los despojos mortales del Principe de las letras Castellanas. Se destacaron sus amigos médicos en la apoteosis de las exequias del Poeta, el Dr. Luis H. Debayle, quien presidio el Comité Darío y asumió con Mons. Simeón Pereira y Castellón, la mayor solemnidad protocolaria de los ocho días de los funerales, del 6 al 13 de Febrero. Entre los decretos de duelo enviado a los funerales de Darío, se figuraron los de la juventud medica de Nicaragua, entre las firmas los doctores Alfonso García, Rafael Salinas, Arturo Vega, el Cuerpo Medico de Managua, concurrir a los funerales y designando a los doctores Manuel Maldonado, Emilio Pallais, J.D. Mayorga, Dr. Nicolás Romero entre otros. El Dr. Manuel Maldonado, elocuente tributo hablo en nombre del Cuerpo Médico, quien fuera amigo fraternal del Poeta. El Cuerpo Médico de Granada, deploro la muerte del esclarecido Poeta y comisiono a los funerales entre ellos al doctor Juan José Martínez, que días mas tarde hizo un estudio del cerebro de Darío, al Dr. Manuel Ubago, hizo amistad con Darío en su época de estudiante en Paris, Francia y quien lo convenciera que en Granada se le quería y admiraba, y otros galenos , El Dr. Cesar Lacayo, Adán Cuadra, etc. Aquí deseara enumerarlos a todos acordándome lo que me expreso uno de los descendientes del Dr. Juan F. Urbina, nómbrenlos a todos ya que con Darío pasaron a la inmortalidad, al menos para los archivos de las bibliotecas Darianas. Al no querer prolongar este ensayo, incipiente si se quiere, recomiendo entre la bibliografía que se refiere a las solemnidades de las exequias del Panida, la lectura del libro del Dr. Darío Zuñiga Pallais “Homenaje a Rubén Darío”, donde aparecen los nombres de otros galenos que asistieron al los funerales del Poeta.
Respecto a recomendaciones, tomo en cuenta el comentario del Dr. Lenin Fisher, distinguido radiólogo residente en Managua, Nicaragua, cuando se refiere a la personalidad del Dr. Rosendo Rubí Altamirano, “que trajo al País el primer aparato de rayos X y tomo la primera radiografía en Nicaragua de quien Darío escribió en el “ Viaje a Nicaragua” “ El Dr. Rosendo Rubí Altamirano, Padre de la Radiología de Nicaragua, trabajo en conjunto con el Dr. Luis H. Debayle, en el Centro de salud, en la Ciudad de León donde instalo el primer aparato de rayos X” y continua seguramente Rubén Darío lo conoció. Sumo este este nombre, y agradeceré otros aportes que darán al ensayo mayor informacion histórica.
Hemos de mencionar que en el programa de los funerales de Rubén Darío, clásico de la literatura universal, le correpondieron a la facultad de medicina de la Universidad Nacional varias noches liricas y la comisión de médicos y sus ofrendas, ocuparon prominentes puestos en el cortejo fúnebre. Una de las voces grandielocuente en los funerales apoteósicos del Bardo, fueron las de sus amigos médicos entre ellos el discurso del Presidente del Comité Darío, Dr. Luis H. Debayle, mecenas y amigo fraternal del Poeta, que dijo en una de sus intervenciones: “ Para Grecia, Homero; para Italia, el Dante; para Inglaterra, Shakespeare; para Francia, Victor Hugo; para Nicaragua, para Centroamérica, Para América Latina: Rubén Darío. El se extiende a todas las edades, es eternista como todo gran genio. El Podría ostentar con justicia la altiva divisa del gran Carlos V “ ego et Tempus” Yo y el tiempo.”
Sin faltar el tribuno y Poeta Dr. Manuel Maldonado, el que fuera en vida mas medico de su alma que de su cuerpo: “ ¡ Gloria a la neurastenia del pensador, tras de cuyas crisis nerviosas y dolores profundos nacieron casi siempre, entre quejas silentes y tal vez entre lagrimas y sangre, unos nardos blancos que fueron cantos a la Luz; unos lirios azules que fueron cantos a la esperanza; unas rosas áureas que fueron cantos al amor y unas adelfas rojas que fueron cantos a la Libertad…”
Miami, Octubre de 2013.
NOTA: AL PROXIMARSE LA EFEMERIDE DEL PRIMER CENTENARIO DEL TRANSITO A LA INMORTALIDAD DE RUBEN DARIO, QUE SE CONMEMORARA EN ENERO Y FEBRERO DEL 2016, CONSIDERO QUE ENTRE LOS FILONES INAGOTABLES DEL POETA, ESTA EL GRAN TEMA DE SU SALUD Y LOS MEDICOS QUE PROLONGARON HASTA DONDE FUE POSIBLE LA VIDA DEL GENIO.
ADEMAS DE ESTE ENSAYO HE PREPARADO “LA SOLEMNIDAD DE SUS EXEQUIAS” CUYAS CRONICAS Y GRAFICAS HAN DE DILVUGARSE CON MAYOR FRECUENCIA, COMO UN JUSTO HOMENAJE AL PADRE DEL MODERNISMO LITERARIO, AL PRINCIPE DE LAS LETRAS CASTELLANAS, CREDENCIAL E IDENTIDAD DEL IDIOMA ESPAÑOL. UNO DE LOS HOMENAJES QUE ESPERAMOS ES QUE EL ESTADO DE NICARAGUA Y LA SOCIEDAD CIVIL PONGAN ATENCION A LA CASA EN QUE MURIO DARIO EN LEON DE NICARAGUA, PROPIEDAD PRIVADA, POCA CONOCIDA; UN DESCUIDADO LETRERO ALUSIVO A LA MUERTE DEL POETA LA IDENTIFICA.